La axiología es la rama de la filosofía que estudia los valores. Los valores son relaciones o propiedades mutuas atribuidas por organismos, en determinados estados, a objetos o personas.
Existen diversos tipos de valores: económicos, estéticos, religiosos, intelectuales y morales. Nos centraremos en estos últimos.
La ética es un campo de estudio que se dedica a analizar el comportamiento humano desde una perspectiva de las normas morales. Dentro de la ética, existen diferentes posturas axiológicas que buscan dar respuesta a la pregunta de cómo deberíamos actuar.
Según la postura con la que se estudian los valores:
- Deontológica: las reglas morales se derivan de valores universales.
- Consecuencialista: los valores tienen importancia según las consecuencias que se deriven de ellos.
- De la virtud: la importancia de los valores se relaciona con el carácter y acciones de determinadas personas.
Según la extensión de los valores:
- Universalista: los valores son importantes para todos.
- Relativista: los valores funcionan dependiendo de un contexto personal, cultural y la sociedad.
Según la existencia de los valores:
- Objetivista: los valores existen por sí mismos y no dependen de los sujetos.
- Subjetivista: la existencia o importancia de los valores reside en la persona que lo asigna.
Cada una de estas posturas axiológicas tiene sus propios puntos fuertes y débiles, y ninguna de ellas es capaz de dar una respuesta completa y satisfactoria a la pregunta de cómo deberíamos actuar. Sin embargo, considerando las ventajas y desventajas de cada una de estas posturas, es posible llegar a una comprensión más profunda de la ética y de cómo deberíamos actuar en situaciones morales difíciles.
Clasificación de los valores
- Clasificación de los valores según Nicolai Hartmann:
- Valores éticos fundamentales
- Lo bueno
- La distinción o nobleza
- La plenitud
- La pureza
- Valores éticos especiales
- Primer grupo
- Justicia
- Sabiduría
- Valentía
- Dominio
- Justo medio aristotélico
- Segundo grupo
- Amor al prójimo
- Veracidad y sinceridad
- Autenticidad y fe
- Modestia y humildad
- Valores del comportamiento externo
- Tercer grupo
- Amor a lo ajeno
- La virtud dadivosa
- La personalidad
- La honestidad
- Primer grupo
- Valores éticos fundamentales
- Clasificación de los valores según Adela Cortina (tipos según sus polos positivos y negativos):
- Sensibles: placer / alegría, dolor / pena
- Útiles: capacidad / eficacia, incapacidad / ineficacia
- Vitales: salud / fortaleza, enfermedad / debilidad
- Estéticos: bello / elegante / armonioso, feo / inelegante / caótico
- Intelectuales: verdad / conocimiento, falsedad / error
- Morales: justicia / libertad / igualdad / honestidad / solidaridad, injusticia / esclavitud / desigualdad / deshonestidad / insolidaridad
- Religiosos: sagrado, profano
Jerarquía de los valores según Max Scheler
Para Max Scheler, existe una jerarquía de valores universal, que todas las personas deben seguir, basada en cinco criterios:
- Duración del valor: Un valor es superior si es más duradero.
- Indivisibilidad: Un valor es superior si es menos divisible.
- Fundamentación: Un valor es superior si fundamenta a otro.
- Profundidad de la satisfacción: Un valor es superior si produce una profunda sensación de placer.
- Relatividad: Un valor es superior si es menos relativo.
Según Scheler, los valores religiosos son los más altos, y su tabla de valores es la única objetiva y válida para los seres humanos, empezando con los valores más bajos y terminando con los más altos:
- Valores de lo agradable y lo desagradable, relacionados con el placer y el dolor.
- Valores vitales, que incluyen la salud, la vida, etc.
- Valores espirituales, como el conocimiento de la verdad y la belleza.
- Valores religiosos, incluyendo la santidad, la fe, y la piedad.
En conclusión, las posturas axiológicas son una herramienta importante para entender y analizar el comportamiento humano desde una perspectiva moral. Aunque cada una tiene sus propias ventajas y desventajas, es importante considerarlas todas para llegar a decisiones morales informadas y éticas. Es importante tener en cuenta que no hay una respuesta única y correcta a la pregunta de cómo deberíamos actuar, y que la ética es un campo complejo y en constante evolución.